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lunes, 22 de agosto de 2022

Vida Y Obra de Lucas Alamán - Parte II - Líder Conservador

 


La cita de Bossuet, que en el primer programa no supimos que significaba: 

400: Alors nous le vîmes s’oublier lui-même ; et comme un sage pilote, sans s’étonner ni des vagues, ni des orages, ni de son propre péril, aller droit comme au terme unique d’une si périlleuse navigation, à la conservation du corps de l’Etat et au rétablissement de l’autorité royale.

425: Tout le royaume faisait des vœux pour la prolongation de ses jours : on se reposait sur sa prévoyance : ses longues expériences étaient pour l’Etat un trésor inépuisable de sages conseils ; et sa justice, sa prudence, la facilité qu’il apportait aux affaires, lui méritaient la vénération et l’amour de tous les peuples. Ô Seigneur, vous avez fait, comme dit le Sage, « l’œil qui regarde et l’oreille qui écoute. » Vous donc qui donnez aux juges ces regards bénins, ces oreilles attentives et ce cœur toujours ouvert à la vérité, écoutez-nous pour celui qui écoutait tout le monde. Et vous, doctes interprètes des lois, fidèles dépositaires de leurs secrets et implacables vengeurs de leur sainteté méprisée, suivez ce grand exemple de nos jours. Tout l’univers a les yeux sur vous : affranchis des intérêts et des passions, sans yeux comme sans mains, vous marchez sur la terre semblables aux esprits célestes : ou plutôt images de Dieu, vous en imitez l’indépendance ; comme lui vous n’avez besoin ni des hommes ni de leurs présents ; comme lui vous faites justice à la veuve et au pupille ; l’étranger n’ implore pas en vain votre secours ; et assurés que vous exercez la puissance du Juge de l’univers, vous n’épargnez personne dans vos jugements. Puisse-t-il avec ses lumières et avec son esprit de force vous donner cette patience, cette attention et cette docilité toujours accessible à la raison, que Salomon lui demandait pour juger son peuple !

Traducido al español:

400: Entonces lo vimos olvidándose de sí mismo; y como un sabio piloto, sin asombrarse ni de las olas, ni de las tempestades, ni de su propio peligro, ir derecho como al único fin de tan peligrosa navegación, a la conservación del cuerpo del Estado y de la restablecimiento de la autoridad real.

425: Todo el reino hizo votos por la prolongación de sus días: confiaron en su previsión: sus largas experiencias fueron para el Estado un tesoro inagotable de sabios consejos; y su justicia, su prudencia, la facilidad que puso en los negocios, le granjearon la veneración y el amor de todos los pueblos. Oh Señor, tú has hecho, como dice el Sabio, "el ojo que mira y el oído que escucha". Tú, pues, que das a los jueces esas miradas benignas, esos oídos atentos y ese corazón siempre abierto a la verdad, escúchanos por el que a todos escuchó. Y vosotros, sabios intérpretes de las leyes, fieles depositarios de sus secretos e implacables vengadores de su despreciada santidad, seguid este gran ejemplo en nuestros días. El universo entero tiene sus ojos puestos en vosotros: libres de intereses y pasiones, sin ojos como sin manos, camináis sobre la tierra como espíritus celestiales: o más bien imágenes de Dios, imitáis su independencia; como él, no necesitas ni de los hombres ni de sus dones; como él haces justicia a la viuda y al alumno; el extraño no implora tu ayuda en vano; y seguro de que ejerces el poder del Juez del universo, no perdonas a nadie en tus juicios. ¡Que él con su iluminación y con su espíritu de fortaleza os dé esa paciencia, esa atención y esa docilidad siempre accesibles a la razón, que le pidió Salomón para juzgar a su pueblo!

Fuente: https://fr.wikisource.org/wiki/Oraisons_fun%C3%A8bres_(Bossuet)/Michel_le_Tellier