En éste análisis confluye la historia antigua de Francia, la Biblia y el ocultismo de la Masonería y su culto diabólico.
De manera clara y directa, si a caso con palabras crudamente ciertas, vemos el verdadero sentido y significado del mensaje, su terrible forma de pensar y actuar del todo anticristianos.
Ésta exposición es una síntesis breve que lleva a la única conclusión posible, que éstas películas erróneamente creídas inofensivas al público infantil, realizadas por adultos progresistas son un descarado manifiesto de objetivos políticos y sectarios, semejantes a sujetos como Epstein o Andrés de Inglaterra.
Puede verse la intención al igual que Disney, de la lograr la destrucción del matrimonio y la familia como si fueran situaciones "viejas" "arcaicas" o "anticuadas", hasta su resignificación "solve et cuagula" como tiene inscrito el idolo demoniaco del Baphomet, darle éste nombre a relaciones antinaturales en un sentido cuyo contenido es ambiguo o "diverso" o lo que es lo mismo que no signifiquen nada y sean fuente de confusión y caos.
En Enrique III de Francia asesinado por valiente católico se realizó la diabólica separación de Dios y el Gobierno, la separación de la Naturaleza y el Gobierno, dando por origen un gobierno aunque breve de los peores errores y sombras en que puede caer el género humano sin Dios, y abiertamente consagrado al maligno.
Mi intención no es escandalizar, si les escandaliza todo esto es porque objetivamente ésto por ser real y verlo de éste modo tiene que ocasionarles algún desagrado y condena.
