López Obrador insiste en su ataque contra historiadores, intelectuales y líderes sociales, a los cuales intenta confundir con "los científicos", "políticos positivistas" aliados de Porfirio Díaz, dichos "científicos" no eran científicos, solo se les llamó así, y no son lo mismo que los actuales intelectuales y científicos mexicanos, por lo cual no hay ninguna justificación para que López Obrador desprecie tanto la ciencia, la cultura y la libertad de expresión, también es importante aclararle a López Obrador que contrario repite sin ningún sustento, en realidad el gobierno de Porfirio Díaz que duró más de 30 años, con leves interrupciones, fue uno de los periodos de estabilidad más prósperos económicamente de México, terminado únicamente por presiones de la masonería estadounidense, que financió movimientos terroristas repudiados por todo México, pagados por la adminsitración del Presidente de Estados Unidos William Howard Taft, miembro de la logia Skull and Bones.
A López Obrador no le gustó la carta enviaron los intelectuales denunciando las acciones ilegales, autoritarias y abusivas de su gobierno, la destrucción de instituciones democraticas.
Para López Obrador que el Estado ya no proteja intelectuales, significa privar de recursos a la cultura y la ciencia, eliminarlos. Pero por su parte, el se dedica a financiar con millones de pesos a personajes comunistas y extranjeros españoles como Paco Ignacio Taibo II, a quien impuso al frente del Foro de Cultura Economica, quien es sin lugar a dudas un intelectual orgánico del lopezobradorismo o de la fallida Cuarta Transoformación.
Sobre todo López Obrador gasta millones de pesos no en intelectuales, sino en propagandistas orgánicos, aplaudidores.
Aunque en HRZ Radio siempre hemos sido críticos de la corrupción que representa el intelectual masón sionista Enrique Krauze, lo hemos hecho por sus similitud de pensamiento con López Obrador también miembro de la "fraternidad universal", lo cierto es que las críticas de Krauze, o a las que se sumo, no son solo las suyas sino las de otros muy respetables intelectuales como Jean Meyer, son una clara y verídica descripción de la realidad.
Por otra parte la solución dada por los intelectuales no parece ser la más correcta ni radical, esperar a las elecciones de 2021, son la garantía de un fraude electoral orquestado por López Obrador.