De Gramsci a Foucault | Agustín Laje y Horacio Giusto

No hay una revolución sino una lucha por la hegemonía cultural. 

De Gramsci a Michael Foucault conversación de Agustín Laje y Horacio Giusto

Publicado el 22 de junio de 2020.

Una mega-catedra de la que debemos de centrarnos en una cosa: “No hay revoluciones sino una lucha por lograr la hegemonía cultural”. En esto han centrado sus esfuerzos todos los grandes capitales Rockefeller, Soros, Rothschild, Warburg, etc. Todos ellos destinaron millones y millones, quizá trillones de dólares en tratar de dictar la cultura y el pensamiento de las masas, guiados por el marxista cultural Antonio Gramsci.

Ellos han creado la corrección política, la tiranía del Lobby LGTBI, la tiranía del feminismo abortista, la tiranía cultural, violenta y muy real del socialismo, del narco-socialismo contra los pueblos de América Latina. 

El comunismo puede invertir un porcentaje no mayor de 10% al espionaje, pero fundamentalmente destina los recursos robados a los pueblos esclavizados a MEDIOS, PROPAGANDA, AGENTES CULTURALES, ARTISTAS, CANTANTES, ACTORS, DIRECTORES, LIBROS, PANFLETOS, PROGRAMAS, todos con la intención de lograr la hegemonía cultural, que domine reprograme la mente de las personas, un conjunto de personas son los pueblos de todas las latitudes.

A partir de la cultura, destruir las relaciones familiares, sociales, las relaciones sexuales, los modos de las relaciones y como se dan, como se definen los grupos y los intereses para los cuales se organizan determinados grupos.  A partir de la cultura se dice que se hace con el dinero, se dicta la justicia, las leyes, quien es inocente, quien es culpable, quien es la víctima, quien está loco, a quien hay que ponerle atención y a quien no hay que prestarle atención, que debes de creer que no debes de creer.

La cultura termina siendo el principal instrumento de PODER. 

¿Qué pueden los miembros de una Nueva Derecha racional equilibrada, justa de avanza o cualquier anti-progre de Michael Foucault y de Antonio Gramsci?

Las ideas tienen mucho valor, nuestra vida está construida con base a las ideas, los hombres libres son aquellos que determinan que ideas van a regir su vida. Son las personas que saben que es lo que quieren en la vida. 

Las ideas no aparecen por si solas en las personas, sin embargo, los que son esclavos de las ideas creen que las ideas les surgen porque si, y se someten a ellas, y no las discriminan, no las analizan porque terminan pensando que les han surgido a ellos, y que no pueden ser erróneas.  

Los seres humanos somos consecuencia de las ideas. La historia misma es una exhibición interminable de ideas dominantes. Los signos de los tiempos fueron las ideas que dominaron y tuvieron un impacto de movilización social, porque lograron hacerse hegemónicas, esa hegemonía no fue el producto de un azar. 

Muchas veces las personas se centran a partir de la evolución materialista de la tecnología. Muchos, aunque no lo saben verdaderamente hay terminado pensando en cierta forma como los marxistas más vulgares y primitivos, materialistas históricos, al creer que todos los cambios fundamentales se han producido solo a partir del cambio de las relaciones materiales. 

“Modificaciones técnico-económicas-estructurales pueden explicar por si solo todo lo que cambia en el plano de las ideas” comentó Laje, que es el pensamiento más burdo del materialismo dialectico. 

¿Pero cuál es la otra parte de la ecuación? ¿La que no se mira?

¿A caso no hay ideas en la forma en que se organiza las naciones de Occidente? ¿Qué acaso no hay ideas en las normas morales que adoptan las personas? 

Son ideas, fundamentalmente ideas, conjuntos de ideas que forman cosmovisiones y condicionan la visión y el pensamiento, diríamos ideologías. 

Hay muchas personas, el grueso de la población que como una especie de esponja absorben cualquier conjunto de ideas erróneas, sin ni siquiera detenerse analizar la validez real de tales ideas. Si tales ideas y concepciones tienen una congruencia con la realidad. 

Comprender las ideas tiene una función práctica. “Es liberador” no solo tiene una función practica de poder de explicar los sucesos en el mundo en razón de las ideas: Transhumanismo de Lucas; el Feminismo; las ideas importan, y nuestros pensamientos tienen consecuencias. 

OBSERVACIÓN: Curiosamente, esto lo relacione inmediatamente con aquello que dice, he pecado de PENSAMIENTO, PALABRA OBRA Y OMISIÓN, todas esas acciones, fundamentalmente la primera tiene que ver con ideas, con razonamientos y conciencia.

“El hombre libre es aquel que es capaz de elegir sus ideas”, éstas ideas vienen a ser también como objetos que pueden ser útiles, pueden ser inútiles, pueden ser nocivos, poderosos, peligrosos, pueden ser ideas simples, humorísticas...

Hay ideas verdaderas o hay ideas falsas. 

Escuela de Frankfurt: La dimensión y los conceptos de éstos autores e ideas es enorme, no se puede decir que en la actualidad se conozcan todos por una sola persona, pero Agustin Laje se conoce a los más importantes: Gramsci y Foucault. 

Vamos a darnos una idea, si vemos por ejemplo quienes son los autores que: Gramsci, Foucault, Horkheimer, Adorno, ¿Walter Lippman? Quizá también por su obsesión por la hegemonía cultural, Marcuse, Pollock, Erich Fromm, Walter Benjamín, Leo Löwenthal, Franz Leopold Neumann, Georg Luckas, Félix Weil, Wilhelm Reich, Slavoj Zizek, Shulamith Firestone.  

Siendo más claros, todos estos pensadores sionistas, viene derivados de las deletéreas escuelas de Fraude, Marx y Hegel, vienen a ser derivados de esa mezcla entre materialismo y psicología.

Louis Althusser, Jacques Lacan, Gilles Deleuze, Féliz Guattari, Jean-Francois Lyotard, Valentin Voloshinov, Frantz Fanon, Norman O. Brown, Jürgen Habermas, Carl Grünberg, Stefan Gandler, Franz Neumann, Konrad Ott, Axel Honneth, Rainer Forst, Richard Lehun, Leo Löwenthal, Paul Massing, Lutz Wingert, Albrecht Wellmer, Hilda Weiss, Alfred Schmidt, Rahel Jaeggi, Andrew Bowie, Regina Becker-Schmidt, Magnus Hirschfeld, etc.