Se acabo el tiempo en que el todo poderoso pigmeo político e intelectual tirano "Presidente de la Republica Mexicana" en turno junto con su orbita de influencia mediática, política y económica, Televisa, TVAzteca, periódicos de divulgación nacional y la prensa de izquierda, Consejo Coordinador Empresarial, Carlos Slim, Ricardo Salinas Pliego, Germán Larrea, Grupo BAL, etc. podían fingir el cuadro perfecto de la mal llamada "cotidianidad de la vida política y social...", vivimos tiempos anormales, y situaciones intolerables, que han exigido cambios en nuestra forma de pensar, actuar y organizarnos, y que han extinguido todos falsos optimismos infundamentados donde no hay futuro, y se acabado el camino donde se abren muchos otros, que toman otros nombres, y no reciben el nombre ni es posible transitarlo con los lastres del pensamiento de izquierda, que como natural reaccionaria teme, y entra en crisis ente lo nuevo, por lo que toma acciones extremas para no reconocer que el tiempo le alcanzó también a ella, como todo lo que tiene principio tiene un fin, no hay misterio que por muy oculto no pueda ser revelado. Entre las acciones desesperadas de la izquierda, es tratar de de impedir el paso de la humanidad, y decir, "No" por ahí no, caeran por el borde la Tierra, "no existe nada más halla", "halla no hay nada que ver", "se burlaran de ustedes", "son unos ridiculos", "ustedes no pueden vivir sin mi", "no me dejen de ver...", "lo intentaremos otra vez... todo será diferente ésta vez... los tratare mejor" (como la mujer golpeada), "tienen que creer en mi...", "tienen que confiar", "nooo", "¿A donde van?", "Lo que están haciendo está mal...", "la solución es más impuestos", "el capitalismo es una jungla", "tengan miedo mucho miedo...", "si van se quedaran solos...", "no me dejen".
Mientras poco a poco todos los hombres le van dando la espalda, oyen sus gritos, pero ya no puede engañarlos, ya no puede dividirlos como antes. Es el fin de la izquierda.
Hemos aprendido que lo que no hagamos nosotros, no lo hará nadie más al ser un grupo mayoritario totalmente excluido de la política, millones de mexicanos (concepto aún para muchos nebuloso) no hallan representación en ninguna mafia política (partidos políticos o grupos sociales), apesar de hallamos distribuidos estratégicamente diversificados en todas las clases sociales, en todos los trabajos, y en todas las regiones del país.
No hay periodista que nos de voz, no hay político que nos de voz, no hay concordancia con ningún partido político ni ideología, no hay futuro en los planes de organismos internacionales, no hay nuestra voz en los grandes medios de comunicación, no está nuestro animo y felicidad descrito en las carteleras de cine, ni en los espacios de entretenimiento, no hay lugar de reposos, ni paz, no hay en las librerías aquellas ideas nutritivas de las que necesitamos crearnos y recrearnos, no hay ni en México ni en el Mundo semejante idea que pueda satisfacer nuestro desarrollo como personas. No hay en las estaciones musicales la música que nos hace vibrar, ni los sabores que buscamos en las calles, no hay ese sentimiento de pertenencia a nada de eso.
Solo vacío y exclusión. Viajamos a otros países solo para encontrarnos con lo mismo, miramos a nuestros ancestros solo para encontrarnos con lo mismo. Todo ésto quiere decir que por primera vez nos estamos dando cuenta de lo que somos, que dista mucho de lo que nos dijeron que eramos.
Los viejos valores, discursos, paradigmas, concepciones, limites, resistencias, ya no nos hacen nada. Estamos en una fase de expansión. Determinados a definir y tomar nuestro espacio, defender nuestro hogar, nuestras tradiciones, y nuestra evolución cultural, sin que nadie pretenda coartar o deformar la estética, ritmo y movimiento que va tomando.
Esta saliendo a las calles, todo eso que la izquierda y sus fobias estigmatizaron con cuentos de brujas quemadas, pasados gloriosos inexistentes, sacralizaciones de cosas materiales, reverencias, lisonjas, ceremonias hipocritas carentes de significado, formalismos, protocolos, palabras, lugares comunes, convencionalismos, usos y costumbres muertos, complejos, prejuicios, todos de izquierda. Desde que se dice un no me gusta, hasta que se dice Fuera López Obrador. Y los mexicanos se unen a una causa internacional, contra el mal de Rusia, por llamarlo de algún modo.
Por eso, FRENA es una realidad, asoma por primera vez en la historia de México, después de más de 195 años la salida de un cuerpo que por primera vez actúa por iniciativa propia, después de tantos años de existir, pero en silencio. De actuar productivamente, económicamente hablando pero sin expresarse políticamente hablando.
De ser una fuerza que sostenia muchas cosas, que fue explotada, robada, esclavizada, ofendida, humillada, torturada, abusada, por la criminal mentalidad de Izquierda (los opresores, los cerdos, los parasitos, los que quieren repartir lo ajeno, los que no producen nada, son manos muertas, manos activas, mentes activas en hacer el mal), hoy se rebela al grito de Fuera López Obrador, porque es mi derecho, porque así lo pienso, y hagas lo que hagas no me vas a cambiar, soy libre de decirlo, y actuar en consecuencia. Se acabo el doble pensar. Hay un solo pensar, y un solo actuar de Derecha, porque entre más me voy a la Derecha, más te muestro mi rechazó, y más arrojo todo lo malo de éste mundo, y veo, confirmo, y no me equivoco en decir, que la izquierda es el basurero de la política de las naciones, la letrina de la política y la intelectualidad.
Contario a lo que muchos pudieran pensar, no había sido que faltaran las intenciones, sino que el trabajo y las ocupaciones más productivas agendaron en el tiempo un mucho más tarde a las expresiones políticas, artísticas y culturales.
El modelo vil de economía socialista impuesto por el PRI y trastornos políticos exteriores, así como sociedades secretas como la Masonería, han limitado mucho el tiempo y las oportunidades, para que se pudieran expresar políticamente, los mexicanos.
Aunque aún están secuestradas aún la mayoria de los sujetos de prensa, la Televisión, la radio, la política, la cultura por la Extrema Izquierda Progresista, que no está dispuesta a soltar los espacios públicos de que por siglos ha parasitado la vida política, intelectual, cultural, artística, expresiva y activa de México.
Tampoco nos importa ya, eso es FRENA. ¿Qué nombre pudiera tener sino es algo nuevo? No viene de una campaña publicitaria de revistas de modas, de canales de Televisión, de un nombre frivolo y comercial, como detergente, o partido político, o papel higienico. Que halla tenido que pasar por los filtros de la publicidad, de lo políticamente correcto, de lo esteticamente correcto, de lo paradigmaticamente habitual, del discurso viejo de dejarse el pelo largo y minifaldas. No iba venir de ahí, o de gritar alguna tonteria como somos un nuevo partido político. Porque ya no está en ese modelo. No necesito que me represente nadie. Puedo hablar por mi, puedo pensar por mi, puedo hacerlo yo, no necesito de las viejas estructuras decimononicas.
No estoy de acuerdo con MORENA.
No estoy de acuerdo con el PRI.
No estoy de acuerdo con el PAN.
No estoy de acuerdo con el PRD (Viejo PRI Cardenista).
No estoy de acuerdo con las feministas.
No estoy de acuerdo con la ONU.
No estoy de acuerdo con los demás que ya están. No me representan, no los veo ni siquiera como mexicanos.
No estoy de acuerdo con Denise Maerker, ni con Ciro, ni con Televisa, ni con Radioformula, no estoy de acuerdo con Loret, no estoy de acuerdo con Aristegui, no estoy de acuerdo con Paco Ignacio Taibo, no estoy de acuerdo con Krauze, no estoy de acuerdo con Denise Dresser, Zuckerman, Sergio Sarmiento, no estoy en en ellos, ni presente, ni reflejado, ni conforme, al grado tal, que les veo claramente como las resistencias a la muerte del modelo político de izquierda. No estoy porque soy otra voz. Una voz humilde, que se toma con más respeto las cosas que le rodean. Ese soy yo, y eso es FRENA.
La izquierda extranjera atea, futurista, fascista, nazi, por naturaleza, mira con temor por primera vez después de muchos años, que ese sector de la población que creía ya exterminado para siempre o invalidado por sus propias ideas, aún existe, y que se fortalece y relegitima ante los totales vacíos de la izquierda.
No es que la izquierda no haya intentado llenar esos vacíos, es que no puede. La izquierda no produce nada, solo roba, usurpa lugares, palabras, conceptos, imágenes, voces, cuerpos, espacios, almas. Pero no produce nada. La izquierda sufre de varias enfermedades propias de la senilidad, problemas de memoria Alzheimer (para no ver sus crímenes y total fracaso), problemas de movilidad esclerosis múltiple, falta de sensibilidad, problemas de la vista (para no ver sus fallos y víctimas), problemas del oído (porque no quiere escuchar), problemas de orden espiritual (porque ha eliminado a Dios y su Iglesia de la vida pública), problemas de identidad y orientación sexual (LGTBIAQ feminismo), problemas de movilidad, esterilidad, inutilidad, y ha sido sobre pasada por el presente por haberse hecho una idea falsa de eterna frivolidad juvenil terrenal, la izquierda tiene la certeza de que está muriendo, y no importa cuando invierta en su imagen, no pude ocultar su edad, y su esterilidad porque jamás dió los frutos que prometió.
FRENA es el cuerpo político, que aún sin una formación política como tal, como es tierno escuchar, que dice que no es de Derecha, ni Izquierda, pero a veces cae en decir que FRENA es incluyente y señala personas de izquierda, o que vinieron de la izquierda al movimiento, sin darse cuenta, que ahi ya no hay izquierda.
Esta desarrollando, como todo lo que es primerizo, su propios brazos, piernas, extremidades, herramientas, con una técnica que muchos piensan rudimentaria, se centran muchos en descalificar eso, sin darse cuenta que el paso que hemos dado, dentro del desarrollo político, intelectual y moral, hacia el exterior, que es la expresión, ha sido el más importante y trascendente, que se ha dado.
El hecho de decir, soy mexicano, tengo derecho de ir zócalo, y que el régimen diga no. Es todo un acontecimiento. ¿Por qué no? Detrás de muchas justificaciones arbitrarias, rocambolescas, inmorales, absurdas, ridículas que da López Obrador, está en realidad, el "Tu no", "el tu no puedes", "se supone pone que tu no puedes".
FRENA está profanando los tabús, los estereotipos, las creencias de izquierda, las fobias, los paradigmas de la política mexicana de izquierda. No puede ser. El reaccionario grito de la izquierda es "Tu no puedes, tu no, no puedes, que atrevimiento, que falta de respeto, tu no puedes", y FRENA le dice puedo, y no voy a ir de aquí, hagas lo que hagas.
Empieza López Obrador ha buscar con desesperación el tótem de la silla presidencial, del te reprimo para que no te hagas daño, y todo se reduce a un infundamentado tu no, tu no puedes, gozar de los mismos derechos.
Entonces FRENA es una clase oprimida, explotada, discriminada, abusada, y eso ya no se puede ocultar al mundo.
No se puede ocultar la mentira del se tu mismo. Se tu mismo y veras lo que te pasa, se tu mismo y veras lo que te puedo hacer.
La mentira de todas las voces son bienvenidas, pero solo quiero gente de izquierda.
Se sale de completo, de lo tolerable en la narrativa tendenciosa de la izquierda.
La exhibición de poder, demuestra claramente la fragilidad, los alfileres con que se sostiene López Obrador su partido y turbas.
No es el poder que es tan grande que engulle a todos, y a todos mueve sin que se den cuenta de que los mueve funcionales a sus propósitos.
No, es un poder débil, sostenido en el mito de las urnas, cuando las urnas, no son más que un viejo mecanismo de expresión política, dudoso. ¿Qué se puede poner en duda cuando los mexicanos alzan la voz directamente sin la necesidad de que medie nadie más diciendo Fuera López Obrador? ¿Cuál es la magia del rito siniestro del suicidio en las urnas, de lo que hace a oscuras, en secreto, por gente que no conocemos, y que a lo mucho puede ser una imagen distorsionada la que retratan las urnas. Mitologia, pensamiento mágico, convencionalismo reaccionarios, López Obrador como ser de izquierda, parasito que vive del conflicto social y la mentira cambiante no puede sorportarlo. Porque esperaba una MASA de individuos, listos para ser pervertidos por sus manos. Y encuentra solidos hechos y derechos hombres y mujeres, con identidad nacional, que no se hallan representados en los criminales traidores a la patria: Benito Juárez, Madero, Cárdenas, Emilia Zapata, Obregón, etc, ni en él. Doloroso, insoportable es para López Obrador, y sobreviene la negación, y la orbita (o la corte, es incapaz de decirle al emperador que anda con el culo de fuera exhibiendo su fealdad y mal olor) se plega esa negación. Un régimen que fallece, en el lecho, es clásico ver rápidamente las aves de rapiña que se agolpan, para que les firme el Testamento Político, como cuando era la caída del Reich Alemán, Himmler decir ser el sucesor de Hitler, Goering decia ser el sucesor de Hitler, mientras el mismo Hitler los declaraba a todos traidores y se suicidaba, dejando el poder simbólico en manos de un total desconocido para el mundo. Así opera el canibalismo político de la izquierda.
Al avanzar se está conquistando un nuevo terreno inexplorado. FRENA es eso algo, que sin apoyo mediático se está expresando, y burlo los filtros de la Izquierda Conservadora de los Viejos Criterios y paradigmas de lo que es el gobierno, la democracia, las instituciones, y la libertad de expresión.
La izquierda está aterrorizada porque abuso del muñeco de paja y la caricaturización de los sin tierra política, de los que creyó sin espacio político, de los que creyó desposeídos de voz, pensamiento y representación.
FRENA ES UNA REALIDAD. Estamos aquí.
Y como negación en éste momento, la izquierda en un ataque de fobia, dice: no, no es cierto. Frena es un fraude, tiene que serlo, (o morire... o morieremos dicen los partidos y los medios).
Es como decir, "Aquí estoy y existo, y no necesito de tu asquerosa aprobación tiranía de Izquierda para poder respirar y existir, quiero ejercer todos mis derechos, todos de los cuales ustedes nos han despojado". Por eso el terror de la izquierda, porque siendo esto FRENA son millones y solo falta se están dando cuenta, justo en éste mismo instante.
Es tarde, aquí estamos. Yo Héctor Rosales también soy FRENA, atacando desde el FRENTE de las ideas.
