Heinz Linge dijo que a Hitler le gustaba los villancicos navideños contrario a las neopaganas SS de Himmler

HITLER SOBRE LA NAVIDAD: "Las SS tenían un misticismo forzado y algo ridículo hasta para el mismo Hitler: en la Navidad de 1940, mientras presenciaba la celebración pagana de Yule de los Leibstandarte de las SS, Hitler se dirigió a un ayudante y le comentó en tono socarrón que no había nada como el villancico Noche de paz". 

FUENTE: "El Camino de la guerra". Editorial. Planeta. Barcelona, 1990. Página 80. Memorias de Heinz Linge, cita: 

"Como quisiera que la Navidad [de 1939] estaba a la vuelta de la esquina, Hitler monologó acerca de la Navidad y de las canciones de Iglesia, que en contraposición a Bormann las juzgaba como hermosas y edificantes (A Bormann no le gustaban) [...]. "¿Qué hay más hermoso- pregunto él [Hitler]- que 'Noche de Paz, Noche Sagrada'?", Heinz Linge: "Bis zum Untergang". Wilhelm  Goldmann Verlag, Múnich, 1983, 2a edicción. Página: 190.

El paganismo chovinista de ciertos nacional-socialistas fue un completo error, y eso lo sabía bien Hitler, por eso lo prohibio después de 1941, se refirió como tonterias al nordicismo y como incoherentes galimatias al contenido de los horrorosos libros de Frederich Nietzsche sobre el Superhombre, que se les obligaba a leer a los jovenes alemanes y luego decirles que eso debian ser de adultos. Esta de más decir que Nietzsche era masón, y financiado por la banca sionista, como el mismo reconocio en su correspondencia privada, y como el rabino Josué Jéhouda (nombre real: Josué Koldriansky) en su libro: El antisemitismo, espejo del mundo, reconoció, que las revoluciones en el mundo no han sido otra cosa, que los intentos del sionismo de descristianizar el mundo.

Yo lo que si condenaría totalmente de esa "Navidad Hitleriana", es que el símbolo del Partido Nacional-Socialista la "esvastica" sea puesta en todo, aquello no debe ser, porque las instituciones son de todo el país no solo de un partido.

Pero esto derriba una vez más el mito de que Hitler hubiera sido un anticristiano furibundo como los comunistas, como también lo reafirma el tratado Reichkonkordat.